Comienza a acabarse el plazo del mercado de fichajes y los contendientes cierran las últimas contrataciones. El equipo de los elípticos se ha hecho con los servicios de Federico Ocaña, un jugador muy a tener en cuenta en el caso de que consiga aceptar las reglas del juego. El poeta dadaísta, muy acostumbrado a la desacostumbre, ya ha comenzado a hacer estragos en las mentes de sus compañeros de equipo. "¿Y por qué en este deporte se juega con un solo balón?", dicen que ha dicho el decidor contradicente.
Llamas rojas
-
Soñé con llamas cubiertas de estandartes,
sus cuerpos eran brasa domada por la honra,
marchaban con el silencio de los confines
como el ejé...
Hace 3 meses
Esto va a un ritmo vertiginoso y está creciendo como la espuma de la cerveza que después bebremos.
ResponderEliminarSeguro que habrán mas anuncios.
me recuerda al partido ese de los filósofos de más abajo
ResponderEliminar